Si hay un mercado que no deja de sorprender al mundo, es el asiático. No en vano es allí donde se concentran algunos de los restaurantes más innovadores.
Sin duda, se trata de un mercado en constante evolución. Cuando se escucha hablar sobre innovación, imaginación, creatividad o tecnología en cualquier sector, es raro que no se haga mención al gigante asiático.
El mercado chino ofrece innumerables posibilidades de crecimiento a quienes apuestan por emprender negocios en sus dominios.
Los empresarios de restauración en todo el mundo lo tienen muy claro. Por eso, mantienen la mirada atenta sobre los avances relacionados con el sector que allí ocurren y así procurar que su inversión les lleve a estar entre los restaurantes más innovadores, no sólo de China, sino del mundo.
Si hablamos de un capital humano de más de mil trescientos millones de personas, se hace evidente que triunfar en este país no es cosa fácil. La competencia es ardua, no sólo por la cantidad de contendientes, sino por la alta calidad de los talentos que pujan por obtener reconocimiento.
La economía de este país se está convirtiendo en la más potente de todo el globo, incluso llegando a posicionarse por encima del mercado norteamericano.
Quizás estos sean algunos aspectos que más llaman la atención a los empresarios de restauración. Introducirse en el mercado chino no solo les otorgaría mayor visibilidad en todo el mundo, sino que les obliga a explotar al máximo todos sus recursos e ideas.
Como son muchos, hemos preparado una serie de posts donde mencionaremos a los restaurantes más innovadores de China.
Empecemos con estos cuatro, que no tienen desperdicio:
ROBOT.HE
Antes que nada, si vamos a hablar de los restaurantes más innovadores, comencemos por Robot.He. Se trata de una cadena restaurantes futuristas de Shanghái, donde los robots sustituyen a los camareros.
Estos curiosos e innovadores establecimientos forman parte de Alibaba, el famoso gigante del comercio electrónico. Cuentan con 57 restaurantes, repartidos en 13 ciudades de China.
Con esta idea de negocio, sus propietarios han ido más allá de ofrecer una experiencia de servicio única y vanguardista. Su objetivo principal es brindar el máximo exponente en eficacia, generando lo mínimo en costes de plantilla.
De hecho, se comenta que comer en estos restaurantes es tres veces más económico que en cualquier otro establecimiento convencional. Además, la curiosidad de los clientes les lleva a desear vivir la original experiencia de ser atendidos por un robot.
Cada restaurante cuenta con unas pistas por donde van circulando los robots. Los comensales realizan sus pedidos a través de una aplicación y la comida llega directo a sus mesas, de la “mano” de estos meseros tecnológicos. Los robots abren la tapa y esperan a que el comensal retire su plato.
Una muestra más de la fascinación que tiene el gigante asiático por los robots y otra prueba de cómo la realidad supera a la ficción.
DC SEAFOOD RESTAURANT
¿Es posible cenar en la cabina de un avión sin tener que comprar un billete, ni tener que viajar a ningún destino? Desde luego que sí, gracias a un empresario chino que en 2012 decidió inspirarse en uno de los aviones de pasajeros más grandes del mundo para crear el DC Seafood Restaurant.
Se considera uno de los restaurantes más innovadores de China. Es un temático muy realista, que replica todas las condiciones del Super Jumbo Airbus A380. Ofrece una experiencia casi exacta a la de estar en un vuelo, pero sin riesgos de colisión, ni turbulencias.
Cada detalle ha sido especialmente cuidado en la decoración, en el servicio y en la atención al cliente. Asientos reclinables con cinturones de seguridad, ventanas de avión en las paredes, alfombras, iluminación de cabina y hasta aislamiento de sonido para recrear el ambiente presurizado de un vuelo.
Cuenta con un área de unos 600 metros cuadrados, donde incluso se puede encontrar una zona de Primera Clase y otra de Clase Económica. Los asientos son variados, según sea la zona que se escoja. Unos son asientos comunes de avión, con una mesa en el centro.
También hay una especie burbuja gigante en forma ovoide, para los comensales que buscan un poco más de intimidad. Una cena aquí ronda los mil euros, casi como un billete de avión, lo que aporta aún más realismo a la experiencia.
Si la decoración impresiona, el servicio es igual de sorprendente. A los clientes les atienden unas amables meseras que han sido entrenadas como azafatas de vuelo. Se maquillan, peinan y visten uniformes, tal y como las azafatas.
ULTRAVIOLET
Es el restaurante experimental y más vanguardista del chef francés, Paul Pairet. Un establecimiento ubicado en Shanghai, que no sorprende únicamente por su comida. Sin quitar méritos a las exquisiteces que allí se sirven, son otros los aspectos los que se hacen con el protagonismo.
Lo que realmente sorprende a quienes lo visitan es la experiencia gastronómica tan original que ofrece. El modelo de experimentación que utiliza Paul Pairet en su establecimiento se define como Psycho Taste.
Más de 20 platos conforman el menú degustación, que se puede disfrutar en un ambiente de efectos especiales que incluyen sonidos aspectos visuales. Estas y otras características son las que le han llevado a ser reconocido entre los restaurantes más innovadores.
El escenario es el siguiente: una sala, una única mesa, diez sillas, comida deliciosa y unas pantallas que hacen de pared. Mucha tecnología al servicio de la gastronomía para crear una experiencia innovadora, donde los comensales harán una inmersión en diferentes escenarios de fondo, durante la degustación.
El escenario es el siguiente: una sala, una única mesa, diez sillas, comida deliciosa y unas pantallas que hacen de pared. Mucha tecnología al servicio de la gastronomía para crear una experiencia innovadora, donde los comensales harán una inmersión en diferentes escenarios de fondo, durante la degustación.
Se trata de una combinación de emociones que se entretejen con los sabores, olores y texturas de las comidas, logrando así que el comensal mantenga activos y complacidos todos sus sentidos.
Entre los platos que contempla el menú degustación, sobresale la otra con caviar, mousse de agua de mar y jugo cítrico. El telón de fondo para este plato es el océano Atlántico. También restalta el Fish & Chips, con el fondo de lluvia y cielo gris londinense. Por supuesto, The Beatles adorna el ambiente musical. Una cena en Ultraviolet ronda los 1500 euros, por pareja.
POLUX
Una vez más nos sorprende el cocinero francés, Paul Pairet. Pero esta vez su estrategia es totalmente opuesta a la que ofrece en Violet o Mr & Mrs Bund. Aquí no veremos efectos especiales, ni música temática y tampoco hay menú degustación. Es una clase de lujo diferente y una propuesta bastante más simplista, aunque muy innovadora.
Innovación no necesariamente implica el uso de nuevas tecnologías o procesos estrambóticos. La idea de Pairet ha sido brindar a las personas aquello que realmente están deseando, aunque no se atrevan a decirlo. Escapar de lo abrumante que puede llegar a ser la etiqueta en la sociedad es algo con lo que muchos sueñan y esta vez es posible.
Aquello que dicen de “menos es más”, combina perfectamente con la idea de negocio que inspiró al chef francés a crear Polux, ubicado en Xintidandi, Shanghai.
Es una combinación de bistro informal con terraza, bar y café francés. Un lugar ideal para reunirse y celebrar la buena vida con un abundante desayuno por la tarde, almuerzos livianos a cualquier hora o acogedoras cenas temprano. Aquí no existen las prisas, las complicaciones, los códigos, las normas de etiqueta ni las imposiciones sociales. Sus clientes lo describen como un santuario de libertad, de cualquier momento, de cualquier indulgencia, eternamente inconformista y siempre a la moda.
Las comidas son ligeras y variadas. Para aquellos que aún no están familiarizados con la cocina de Pairet, esta es una excelente oportunidad para introducirse en su estética y gusto. Para quienes ya le conocen, tienen la ocasión de disfrutar de sus exquisiteces en un ambiente más íntimo, cercano y sí, también más económico.
Polux cuenta con un espacio cómodo hecho con materiales naturales como madera y cuero, decorado con pequeños toques retro, aquí y allá. Cuenta con una barra que sirve limonada, sidra y vino de barril. Los fanáticos del ‘Pairetismo’ encontrarán mucho que experimentar aquí a precios muy por debajo de un viaje al Bund o al Violet.
Es un lugar que crea la experiencia de disfrutar el lujo de la sencillez discreta.
¿Has visitado alguno de estos lugares? Nos encantaría saber tu experiencia en cualquiera de los restaurantes más innovadores de China y del mundo.
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